jueves, 27 de octubre de 2011

Olivar. Una obra de sastrería arquitectónica.

Primero trazamos el círculo sobre el que ibamos a trabajar, para que saliera bien tuvimos que usar una cuerda como radio tirada desde el centro.


Después fuimos provando posiciones hasta conseguir una con la que estuvieramos de acuerdo. No colocamos mientras que con ayuda de un compañero ibamos dibujando el contorno.


Esto no fue fácil a pesar de estar divididos en pequeños grupos y tener un espacio marcado, se añadía dificultad al ser toda la gente que erámos.

        


Este era claramente un trabajo en grupo, habría sido imposible hacerlo solos, además era importante la coordinación, pero en nuestro caso como estuvimos bien organizados logramos obtener buenos resultados en poco tiempo.


Así dejamos lo que habíamos hecho para que otros puedieran verlo y nos fuimos a comer.

Creo que esta organización se vio también en como nos pusimos de acuerdo para traer la comida para el pic-nic, que fue una de las partes que más me gusto, o en el color de las camisetas que también debíamos acordar.

 El grupo de Pic-nic:
Calvo Requejo Sandra
Campos Castro-Villacañas Celia
González Martín Raquel
Sallés Fdez-Pacheco Gonzálo
Sanz Piña Jose Israel

Quizás heche de menos que el pic-nic hubiese sido más general, entre todos los grupos así como el desarrollo de los dibujos del olivar, pero aún así fue una de las experiencias que más me gustó.

No hay comentarios:

Publicar un comentario